miércoles, 30 de marzo de 2011

La chivata memoria

Encuentro asombroso, cómo puede el ser humano aprender cada día, cómo podemos retener para más tarde recordar conceptos, ideas, imágenes...Encuentro asombroso, cómo hay niños que debido a enfermedades o problemas de lenguaje u otras causas, no pueden desarrollar la memoria. Estos pequeños, he podido comprobar, que pese al ejercicio repetitivo o el trabajo más individual, no son capaces de retener apenas palabras. Por ejemplo, aprender la tablas de multiplicar, es una de las mayores odiseas que existe para ellos.

La memoria es sin duda, parte del proceso del aprendizaje. Muchos teóricos de la educación la han denostado, ya que preferían hablar de métodos de aprendizaje en los que no tuviera tanto protagonismo. Sin duda, los recursos y las maneras de dar una clase, pueden cambiar, pero sin esa pequeña o mucha memoria del alumno, es imposible aprender.


En otro orden de cosas y en no pocas ocasiones, desearías no acordarte de cosas, debido a que son temas mas bien negativos, quizás malas experiencias, por las que la persona ha vivido. En ese momento, lo mejor en mi opinión, es quedarse con lo bueno de la persona o situación dolorosa, que con el tiempo, sólo con el tiempo, puede que se aprecie con más objetividad.


Está también el recuerdo de antiguas conversaciones, confesiones, confidencias...En mi personal modo de ver las cosas, pienso que es importante ser, lo suficientemente sincero con uno mismo y a su vez con los demás, para que la persona que recuerda esos diálogos, no encuentre incoherencias en aquellas palabras recordadas, con las nuevas del presente. Es en este caso, cuando normalmente decimos que, la memoria juega malas pasadas.




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